Bajo el Slogan "Emoción a primera vista", esta claro que Mercedes Benz cumple con lo ofertado con el CLA Shooting Brake, la variante con carrocería de estilo familiar del modelo. Hoy os dejamos una versión deportiva de la gama por debajo del 45 S 4Matic, con motor turbo de cuatro cilindros y 306CV.
Estéticamente se distingue por una parrilla específica, llamativos elementos aerodinámicos, llantas de aleación de 18 pulgadas en diseño de cinco radios dobles (de 19" opcionalmente, en tres diseños), imponente difusor y un montón de paquetes opcionales para ganar en agresividad. Mantiene, además, las ventanillas sin marco.
El habitáculo está protagonizado por asientos deportivos en cuero sintético y microfibra Dinámica, con una imagen muy limpia y deportiva, pedales de acero inoxidable pulido con tacos de goma, alfombrillas AMG en negro, listones también de acero en los umbrales de las puertas -con inscripción AMG- o el cuadro de instrumentos digital y el sistema multimedia MBUX, con dos pantallas unidas por el mismo marco.
Delante, se mantiene la habitabilidad del CLA y el diseño típico de Mercedes con las salidas de la climatización redondeadas, la pantalla central panorámica de 10,2 pulgadas, con la gestión por voz inteligente con el ya conocido “Hola Mercedes” del sistema de infoentrenimiento MBUX.
El sistema multimedia MBUX y la instrumentación son los mismos que utilizan el resto de las versiones de la gama Clase CLA Shooting Brake, aunque ofrece más información (fuerzas G o datos del motor, por ejemplo). Como opción, está disponible el AMG TRACK RACE, un sistema que registra y almacena más de 80 parámetros del vehículo durante la conducción en pistas de competición (tiempos por vuelta o sector, velocidad, aceleración, etc.).
Su techo en caída le permite mejorar solo 45 litros de maletero con respecto a la variante CLA convencional y se queda en unos 500 litros de volumen aprovechable, que, si bien es un buen hueco, tampoco es un referente entre los familiares de 4,7 metros de largo.
La variante AMG, equipada con una segunda fila de asientos de estilo deportivo, acomoda mejor a dos ocupantes dada las formas envolventes de sus respaldos, además, el túnel central de los pies de la transmisión 4Matic de serie y la justa anchura, incomodarán a un tercer pasajero central y a sus acompañantes.
Aprovechamos los cinco modos de conducción, que son: el modo Asfalto Resbaladizo, el Comfort, el Individual, el Sport, Sport+, además de un sistema “Launch Control” para aceleraciones desde parado y que este CLA AMG35 Shooting Brake marca en 4,9 segundos para el 0 a 100 km/h.
El modo Sport+, el más deportivo, cambia el sonido del motor a un atractivo tono tosco (vamos, el típico petardeo del que todos estamos enamorados cuando escuchamos un AMG), pero, sobre todo, asegura una respuesta más rápida de reacciones, haciendo que la tracción total 4Matic -también preparada por esta división deportiva- que hasta ahora aseguraba una motricidad óptima y eficaz, sea más contundente en su entrega de par al tren trasero, al tiempo que activa un control de diferencial trasero electrónico que ayuda a inscribir un poco más el coche en curvas.
La suspensión también es única para este modelo, con tirantes de brazos de aluminio específicos y muelles y amortiguadores regulables AMG que le dan una geometría y firmeza más reactiva que los CLA de serie.
En este caso, creo que no hablaremos de consumos, aunque el modelo cuenta con una etiqueta medioambiental C y unos consumos de catálogo de 8L/100. La verdad es que nosotros no hemos conseguido bajar del 9,8 de media, y mucho más si le buscamos las cosquillas a un motor siempre dispuesto a ello.
La variante deportiva AMG 35 monta un motor de gasolina de 1.991 cm3 y 4 cilindros con turbocompresor de doble entrada, cuya potencia máxima alcanza unos muy respetables 306 CV. Se acompaña de un cambio automático de doble embrague AMG Speedshift 7G y el sistema de tracción total 4Matic viene de serie. Con estas características, acelera de 0 a 100 en 4,9 segundos y alcanza una velocidad máxima limitada a 250 km/h.
En definitiva, estamos ante un coche deportivo, pero que en ningún momento llega a radicalizarse, seguramente porque desde la firma entienden que este Shooting Brake, a pesar de sus particularidades, sigue siendo un coche familiar que podría utilizarse para el día a día.
El precio base de esta versión es de 61.025 euros, un precio que incluye pack estético AMG de serie, aun así este Mercedes, como es habitual en la marca, permite llegar a niveles de personalización, como el pack de asientos mencionado o el kit aerodinámico AMG con perfiles en color negro y llantas específicas, como las que monta esta unidad. En definitiva, un catálogo que te puede llevar a conseguir un coche único por un "módico precio".



